miércoles, 13 de enero de 2010

Capital matutino

¡Buenos días!

No sé si será éste el más importante matutino que jamás haya, pero de momento la capitalidad matutina se encuentra a la vera de la ribera del Arlanzón, amén de los buenos réditos (amorosos, de bienestar, ...) que se me producen cada mañana cuando acudo al banco matutino a solazarme mental y anímicamente, asomado a la ventanilla desde la que veo la esplendorosa ribera, hoy de gris plomo y lloviznas y con las mismas agradables temperaturas invernales de ayer (4ºC al mediodía).

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo el nuevo documental de Michael Moore, "Capitalismo, una historia de amor" ("Capitalism: a love story"). Es el cuarto documental que veo de este director, en el que se denuncia al sistema capitalista; tras "Bowling for Columbine" (2002), donde se denunciaba la cultura armamentística estadounidense; "Fahrenheit 9/11" (2004), en el que se denunciaban las verdaderas motivaciones de la guerra de Irak, las financieras; y "Sicko" (2007), donde se denunciaba el sistema sanitario estadounidense; cuyos matutinos podéis ver pinchando aquí.

Otro documental más con el inconfundible sello de Michael Moore, en el que esta vez se busca a los culpables de la crisis capitalista (los dirigentes de multinacionales, bancos y bolsa), crisis que, como siempre, deja "en bragas" a los más débiles, mientras los poderosos siguen aumentando sus monumentales emolumentos, abriendo injustamente aún más la brecha entre ricos y pobres. Este diagnóstico pesimista de la sociedad norteamericana, a pesar de cierto toque demagógico y superficial, tiene muchos otros gozosos y lúcidos momentos que compensan con creces lo anterior. Entre otros, el mostrar palpablemente la tremenda injusticia del rescate de los bancos, cuando estos no rescatan a los pobres desahuciados por su ávida, usurera y corrupta actitud de ganar dinero a toda costa. Desde luego se hace necesaria una reflexión para cambiar radicalmente este podrido sistema de valores capitalista.

Ahora, un poco de patrimonial sabiduría ajena, de la que espero saquemos todos el mayor provecho posible (aquí no hay usura que valga):

- "No basta con la sabiduría, es necesario saber utilizarla". (Cicerón).

- "En acabándose la plata, el amor se desbarata". (refrán).

- "El banquero es un señor que nos presta un paraguas cuando hace sol y nos lo exige en cuanto empieza a llover". (Mark Twain).

- "Más que por las ideas, a los hombres les separan los intereses". (Alexis de Tocqueville).

- "Solo hay dos palancas que mueven a los hombres: el miedo y el interés". (Napoleón).

- "El trabajo es un título natural para la propiedad del fruto del mismo, y la legislación que no respete ese principio es intrínsecamente injusta". (Jaime Balmes).

- "La riqueza es un poder usurpado por los pocos para obligar a la mayoría a trabajar en su provecho". (Percy Shelley).

- "El dinero es una nueva forma de esclavitud, que tan solo se distingue de la antigua por el hecho de que es impersonal, de que no existe una relación humana entre amo y esclavo". (León Tolstoi).

- "El capital no es un mal en sí mismo. El mal radica en su mal uso". (Mahatma Gandhi).

- "Debe ser triste el estado de conciencia del rico, que ya cerca del final, cae en la cuenta de que el destino le concedió el más poderoso instrumento de bien que puede haber en el mundo y sin embargo lo empleó en frivolidades". (Amado Nervo).

- "No gastes tu dinero antes de ganarlo". (Thomas Jefferson, tercer presidente de los EE.UU., 1801-1809).

- "Considero que las entidades bancarias son más peligrosas para nuestras libertades que la fuerzas militares. Si los ciudadanos americanos permiten a los bancos privados controlar la moneda, primero mediante la inflación, y después mediante la deflación, la banca y las corporaciones que proliferen alrededor despojarán a los ciudadanos de toda la propiedad hasta que sus hijos se queden sin casas en un continente que conquistaron sus padres y a quienes pertenece todo lo que haya alrededor". (Thomas Jefferson, tercer presidente de los EE.UU., 1801-1809).

- "La bancarrota es algo grandioso: es el abismo inmenso y sin fondo en el que se sumergen y desaparecen todas las falsedades, públicas y privadas". (Thomas Carlyle).

Besos y abrazos,

Don.
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