miércoles, 7 de abril de 2010

Matutino titánico

¡Buenos días!

No creo que éste lo sea, pero seguro que sí que lo fue el anterior, que con eso de que tenía que glosar tres películas vistas en la pasada Semana Santa, y con los correspondientes hipertextos y anexos relacionados, me quedó algo gigantesco. Es más, de tan colosal que me quedó, se me extendió no solo en tamaño, sino en el tiempo, y se me convirtió en un vespertino. Por lo demás, la primavera ahí sigue, siempre enfrentada con titánico tesón a este díscolo clima ribereño, hoy de gris nubosidad, alguna llovizna, insidioso viento y temperaturas que ni llegan a los 10ºC, pero cual titán seguro tiene el poder de superar esa y cualesquiera otras adversidades, volviendo, como en los dos pasados días, por sus más luminosos y templados fueros cuando menos lo esperemos.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Furia de titanes" ("Clash of the Titans"), de Louis Leterrier, y con Sam Worthington (también protagonista de "Avatar"), Ralph Fiennes y Liam Neeson. Es un remake de un film homónimo de los años 80. Por su título deduciréis que va de mitología griega, en concreto de Perseo y sus odiseas. Con multitud de licencias sobre la mitología griega (se inventa nuevos sucesos y relaciones, mezclando unos con otros), como ya sucedía en la vista recientemente "Percy Jackson y el ladrón del rayo", un film infumable cuyo matutino podéis ver pinchando aquí, nos cuenta las aventureras vicisitudes del héroe y semidiós (hijo del dios Zeus y una humana, Dánae) Perseo, especie de marioneta (aunque él no lo crea) en la lucha entre los hermanos Zeus y Hades ... ¿Determinismo del Oráculo o libre albedrío? ...

Esta película, solo un poco mejor que el despropósito de la de Percy Jackson, parece que nos habla de la rebelión de los humanos contra la tiranía de los dioses, de negarse a acatar sus dictados y luchar por el libre albedrío de la humanidad, pero esto es un engaño, un "mcgoophin", pues en realidad tiende a ser una apología de la religión y de que no podemos vivir sin los dioses. No sé si por casualidad, más bien creo que metido con calzador, se trata de asemejar, a capón, las mitologías griega y cristiana, forzando paralelismos (vamos, que en este film se pervierte la mitología griega para asimilarla a la cristiana): la lucha de Zeus contra Hades (Dios contra Lucifer), Perseo hijo y Zeus padre (Jesucristo y Dios), destrucción de Argos (destrucción de Sodoma y Gomorra), Perseo salva de la ira divina a los hombres a base de sus penalidades (Vía Crucis de Jesucristo), ... y más. En el fondo todo es lo mismo, empezando porque el primer mandamiento cristiano, "Ama a tu prójimo como a ti mismo", es universal, aparece de uno u otro modo en todas las culturas terráqueas, de antaño y de hogaño, cada una con su mitología (en esencia, la misma). En definitiva, todas religiones no son sino mera mitología.

Ahora, para afrontar cual titanes los conflictos vitales que pudieran acaecernos, nada como un poquito de sabiduría ajena:

- "No acometas obra alguna con la furia de la pasión; equivale a hacerse a la mar en plena borrasca". (Thomas Fuller).

- "La vida es un cuento narrado por un idiota, lleno de sonido y furia que nada significa". (William Shakespeare).

- "Esta vida es un combate perpetuo, y la filosofía es el único emplasto que podemos aplicar a las heridas que recibimos por todos los lados". (Voltaire).

- "El hombre valeroso que lucha como un bravo obtiene siempre, aunque sólo sea de tarde en tarde, algún pequeño triunfo, y ya es bastante para alentarle a proseguir". (Thomas Carlyle).

- "Cuanto antes nos percatemos de que nuestro destino está en nosotros mismos, y no en las estrellas, tanto mejor para nosotros". (Axel Munthe).

Besos y abrazos,

Don.
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