¡Buenos días!
De momento seguimos de plácida serenidad primaveral, lo que es algo sorprendente, dado lo voluble del clima por estas fechas. Así que la única borrascosa ventolera que tal vez pueda soplar por aquí sea la de mi locura por mis bien amadas hadas y ninfas, quienes revoloteando desde las alturas aterrizan a mi vera cada mañana que me pongo a labrar estos matutinos para así perpetuar pasiones primaverales cualquiera sea el entorno allende los matutinos.
Ayer estuve en el cine viendo una adaptación más, aunque sea la primera que veo en mi vida, de la afamada novela homónima de Emily Brontë, "Cumbres borrascosas" ("Wuthering heights"), de Andrea Arnold, y con Kaya Scodelario, James Howson, Shannon Beer, y Solomon Glave. Es el tercer largo de esta directora, de quien había visto su anterior film, "Fish tank" (2009).
Un granjero del norte de Inglaterra, tras un viaje a la ciudad, regresa a su heredad, en medio de un desolado páramo, con un chico sin hogar que ha recogido de las calles, para que viva como parte de su familia. El hijo lo odia y humilla constantemente, pero la hija entabla amistad con el recién llegado, amistad que se convertirá con el tiempo en apasionado amor. El padre muere y el hijo vuelve casado a tomar posesión de la finca, sometiendo como sirviente al chico. Cuando éste se entera de las intenciones de la hermana de casarse con un rico hacendado vecino, huye. Vuelve a los pocos años enriquecido, con la idea de vengarse de todos, aunque aún idolatre a la hermana.
Con algunas licencias, esta adaptación nos muestra, a su peculiar estilo, esta historia de amor gótico-romántico malogrado, odios fraternales, venganzas, y oscuras turbulencias emocionales agitadas por la furia de las inclemencias climáticas que zarandean a estos personajes atormentados. Con una fabulosa fotografía, sin embargo creo que el modo de contar de su directora estas ardorosas y arrebatadas pulsiones amorosas me dejó frío ... y es extraño, porque casi todas las adaptaciones que había visto últimamente de novelas románticas (del movimiento literario del s.XIX) me habían entusiasmado, como la que ví hace pocos meses de "Jane Eyre", de Cary Fukunaga.
Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos dará buena cobertura ante eventuales vendavales emocionales:
- "En el amor, todas las cumbres son borrascosas". (Marqués de Sade).
- "El hombre puede trepar hasta las cumbres más altas, pero no puede vivir allí mucho tiempo". (George Bernard Shaw).
- "De todas las pasiones, el amor es la que más se irrita y acrece cuando encuentra obstáculos". (Giovanni Boccaccio).
- "No acometas obra alguna con la furia de la pasión; equivale a hacerse a la mar en plena borrasca". (Thomas Fuller).
- "La vida es como un viaje por mar: hay días de calma y días de borrasca. Lo importante es ser un buen capitán de nuestro barco". (Jacinto Benavente).
Besos y abrazos,
Don.
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