martes, 8 de julio de 2014

Perfectos anhelos matutinos

¡Buenos días!

Estos matutinos, estrellas que me guían, me hacen soñar despierto cada mañana, y gracias a ellos camino sin perder mi rumbo vital hacia mi destino, sin el más leve error en su derrota, aunque me equivoque (o equivoquen) de vez en cuando, pero no echo la culpa a nadie, ni siquiera a mí mismo ... caminante, no hay camino, se hace camino al andar, que diría Antonio Machado. La estrella solar sigue luciendo, y haciendo subir un poco más las temperaturas (máxima prevista para hoy de 27ºC), a pesar de pasados inconvenientes tormentosos y granizados, sin dejarse afectar por lo ya pasado, viviendo su momento estelar sin ser hoy velado por nube alguna.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Bajo la misma estrella" ("The fault in our stars"), de Josh Boone, y con Shailene Woodley (estupenda), Ansel Elgort, Nat Wolff, Laura Dern, Sam Trammell, Willem Dafoe, y Lotte Verbeek. Es el segundo largo de este director, que está basado en el best-seller homónimo de John Green, tras "Un invierno en la playa" ("Stuck in love" / "Writers", 2012).

Una adolescente que padece un cáncer terminal desde hace años, aunque ha logrado alargar su vida por un tiempo extra gracias a un inesperado éxito médico, siente gran aflicción por estar al borde de la muerte. Sus padres, que la quieren en exceso (para lo que un adolescente que se precie desea), la empujan a regañadientes a un grupo de apoyo psicológico. Allí conoce a otro joven del que se enamora, y viceversa. Comparten su gusto por los libros, sus temores por su estado de salud, y demás confidencias propias de enamorados. Ella lleva mucho tiempo tratando, sin éxito, de ponerse en contacto con el autor de un libro que le fascina y que relee una y otra vez, quien jamás responde a sus cartas, autoexiliado en Amsterdam, cínico y hastiado de sus compatriotas norteamericanos y de la vida en general. Sin embargo, él consigue ponerse en contacto con la asistente del escritor, quien les invita a conocerle, desbordándose la ilusión de la chica, que espera con impaciencia ver cumplido su mayor sueño, el momento en que el autor le resuelva ciertas dudas que le plantea su novela favorita, "An imperial afliction", y que tanto ha marcado su existencia.

Una muy buena película este drama romántico entre dos poco más que adolescentes, que me gustó por su buen tono en general, a pesar de algunas leves sobredosis emocionales (y alguna que otra americanada), bien toleradas esta vez por mí, gracias al bálsamo de ciertos momentos de humor y descreída mordacidad, no exentas de algo de normal crudeza. Tiene momentos de gran emotividad, como el pre-panegírico funerario de antes del funeral ... sí, siento destriparos el final, alguien muere, como todos lo haremos algún día, antes o después. Si sois de lloro fácil, echaréis más lágrimas que las infinitas estrellas del firmamento, en un fluido chorreón continuo ... y nada discreto, tanto por lo matemático como por lo inmoderado. Así que si no os importa sentir las mejillas empapadas y las narices licuadas, adelante, os la recomiendo. Me gustó también por sus metáforas matemáticas sobre la vida y la muerte; y por su canto al carpe diem, a saber disfrutar de los buenos momentos de nuestras vidas, que haylos, si les atendemos, por muchos pesares que nos agobien.

Ahora algo de sabiduría ajena, que seguro nos guía sin errores hacia nuestro destino, esté donde (y cuando) esté:

 - "Infinito no hay más que el cielo por sus estrellas, el mar por sus gotas de agua, y el corazón del hombre por sus lágrimas".  (Gustave Flaubert).

 - "Si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas".  (Rabindranath Tagore).

 - "El amor, lo único real, luminoso, abrasador e insustituible. Cuanto él no haya tocado con sus manos de milagro, no existe en la realidad. Él sigue moviendo el sol y todas las demás estrellas".  (Antonio Gala).

 - "Ir sin amor por la vida es como ir sin estrella por el mar, como ir al combate sin música, como emprender un viaje sin un libro".  (Stendhal).

 - "Dueños de sus destinos son los hombres. La culpa, querido Bruto, no está en las estrellas, sino en nuestros vicios".  (William Shakespeare).

 - "Créeme, en tu corazón brilla la estrella de tu destino".  (Friedrich Schiller).

 - "Alégrate de la vida porque ella te da la oportunidad de amar, de trabajar, de jugar y de mirar a las estrellas".  (Henry van Dyke).

Besos y abrazos,

Don.
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