¡Buenos días!
Ahora que se fueron, añoro
esos días de dulce y suavísimo otoño que, si bien bastante inusuales a estas
alturas de noviembre, me proporcionaron gratos momentos de placer de los que
disfruté hedónicamente. Ahora tocan los plomizos, desapacibles, ventosos y
lluviosos días típicamente relacionados con esta estación ... de los que
disfrutaré, de sus olores y demás sensaciones con todos mis sentidos, y tanto
como de los anteriores ... carpe diem, nihil obstat ...
Este fin de semana estuve en
el cine con mi cita anual con el genial Woody Allen, que desde principios de
los 90 va a película por año, y de quien he visto todos sus films de este siglo
XXI y la gran mayoría de los restantes desde que debutó en 1965 con "¿Qué
tal Pussycat?" ("What's up, Tiger Lily?"). Estuve viendo "Blue
Jasmine", de Woody Allen, y con Cate Blanchett (espléndida
actuación), Sally Hawkins (también), Alec Baldwin, Peter Sarsgaard, y Alden
Ehrenreich.
Sus más recientes films, los
de este siglo, todos estupendos, algún divertimento y algunos magistrales, son:
- En 2012, "A Roma con amor"
("To Rome with love").
- En 2011, "Midnight in Paris".
- En 2010, "Conocerás al hombre de tussueños" ("You will meet a tall dark stranger").
- En 2009, "Si la cosa funciona"
("Whatever works").
- En 2008, "Vicky, Cristina,Barcelona".
- En 2007, "Cassandra's dream".
- En 2006, "Scoop".
- En 2005, "Match point".
- En 2004, "Melinda y Melinda"
("Melinda & Melinda").
- En 2003, "Todo lo demás"
("Anything else").
- En 2002, "Un final made in
Hollywood" ("Hollywood ending").
- En 2001, "La maldición del escorpión de
jade" ("The curse of the jade scorpion").
- En 2000, "Granujas de medio pelo"
("Small time crooks").
La vida de Jasmine ha dado
un giro repentino, pues hasta hace poco vivía una glamurosa vida plena de lujos
en la alta sociedad neoyorquina al lado de su marido, arriesgado financiero
(coqueteando con el delito, y lo que lleve faldas) que ahora está en manos de
la justicia. Absolutamente arruinada, triste, deprimida y henchida de
ansiolíticos, sin casa ni dinero, se ve en la obligación de irse a San
Francisco a vivir al pequeño apartamento de su humilde hermanastra, que trabaja
como cajera, divorciada y con dos niños, con la idea de empezar de cero. Pero
las ínfulas de grandeza que todavía le quedan la alejan de la realidad y no la
ayudan lo más mínimo.
Otro estupendo film de Woody
Allen, de diálogos inteligentes, marca de la casa, aunque con sólo unas pocas
notas de humor esta vez, un retrato soterradamente despiadado de esta mujer (y
también, quizás, de su hermanastra), de su loca desolación por su incapacidad
para escapar de su pasado, que podría ser el reflejo de lo que ha ocurrido con
la crisis socioeconómica actual que nos asola, esa de especuladores y
malversadores, básicamente de dinero intangible que se roba sin pistola, de
políticos ambiciosos que sólo ofrecen apariencia, de impostura en general, no
sólo de los ricos (venidos a menos, y que son los menos), que también lloran,
sino de los pobres y clase media desplumada en su ignorancia cegada por el
oropel, mientras los otros se quedaban el oro.
Bueno, ahora algo de
sabiduría ajena, que nos aleje de la tristeza y deje un grato aroma en nuestras
neuronas:
- "Ni el hombre conoce cien días de
felicidad, ni la flor conserva durante cien días su color". (Proverbio chino).
- "«¡He perdido mi gotita de rocío!»,
dice la flor al cielo del amanecer, que ha perdido todas sus
estrellas". (Rabindranath Tagore).
- "La estimación es como una flor; una
vez pisoteada o ajada, no vuelve a recobrarse nunca". (Giacomo Leopardi).
- "La esperanza es un árbol en flor que
se balancea dulcemente al soplo de las ilusiones". (Severo Catalina).
- "No perdáis el tiempo ni en llorar el
pasado ni en llorar el porvenir. Vivid vuestras horas, vuestros minutos. Las
alegrías son como las flores que la lluvia mancha y el viento deshoja". (Remy de Gourmont).
Besos y abrazos,
Don.
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